1. Mejoraste, Mujer: ya no vienen como huyendo tus palabras. Mejoraste, Hombre: ya no vienes-te, tan pronto. Tú también mejoraste, mi Compadre, que no vienes con tu mujer ya a traicionarme. 2. Mejoraste mi mujer, ¡oh Vida! Y a mí, quien con algo tan canjeable como (era) mi alma, me contentaba. 3. Mejoraste mi manera de pensar, ¡oh Poesía! 4. ¡Mejoraste mi sexo, Satanás de las Bestias, de las Furias, las Furcias y Ciertos Días! 5. ¡Mejoraste tu luz, Sol! 6. ¡Y tú mejoraste, Dios, a Lucifer y al día! ¡Dios imposible, invisible y deseado! ¡Dios de otro Hado mayor! ¡Dios entre Dioses! ¡Dios humano! 7. Mejoró mi Locura, ya que al fin, sin fin, y quién sabe si con algún extraño (y becqueriano) fin, !estoy loco!