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Ceiba

*Nueva aportacion de Carmen Haddys Torres

Saboreo un vaso de Las Moras; un vinito tinto de intenso color rojo que me llena la nariz de olor a flores del mismo mismo color. Igual me huele a fresas, a vainilla; a café tostado.

Si lo cuento llorando, no dejaria de parecer un capitulo de alguna miniserie local. Si lo cuento con la dureza que me recoge las entranas en estos momentos, de seguro que me sentiria mas cerca y segura.

“No soy nada como ustedes” me gustaria gritar. Pero no me atrevo. Nunca me he atrevido, pero a juzgar por las miradas que a diario recibo, todos lo saben un poco.

Nos sobrecogió a todos y todas por igual. Esta vez fue mas alla. Hace incursion la noticia en la perversidad, en la insensibilidad en esa cara del coraje que no queremos ver.

Americana, blanca, rica, te veo bonita, libre, embarazada, sola, divirtiendose, ejercitandose, de vacaciones, feliz. Muere. Descansa un rato.

Puertorriqueno, negro, pobre, me veo feo, esclavo esteril, solo, sufriendo, inmovil, depredando, infeliz. Vive. No descansará jamás.

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