Ir al contenido principal

Felices nuevos 12 meses

¿Recuerdan queridos lectores (rusos) que hace poco me estuve sintiendo mal, por aquello de que no quería hablar mal del año 2009, pero que nada bueno podía tampoco decir del mismo? Pues he ahí el chiste: “A decade from hell” le llama TIME a los pasados diez años. “El gran cero” denomina uno de sus columnistas a dicha década, dirigiendo su mirada sobre todo al crecimiento económico, motriz y causante de todos los demás crecimientos. Y así por el estilo: a McClintock lo abuchearon cuando dijo que el 2009 estuvo bien, y hasta en ese afán de disfrutar a cada hora, por los pasados dos meses, la navidad, deja algo que decir a los freudianos. La única que no dijo nada fue Montero, que es buena gente (eso dicen) y escribe muy bien.

Por una lógica imperiosa surgida de la nada, habrá que preguntarse de inmediato (ya lo hice) por el año que comienza:

Por el águila

¿nos dará Obama nuestra añorada libertad? ¿lo matará un fanático? ¿dejara de apretar a Cuba? ¿hará una fiesta si es que deshace Guantánamo?

Por el coquí

¿se indignará mi pueblo (como nunca), o dejará al Gobernador hacer y deshacer (como siempre)?
¿crecerá la industria agrícola? ¿luciremos bien en los Centroamericanos?

Et alii

¿se calentara mucho la Tierra en este año? ¿se morirá África de una vez y por todas? ¿Eco recibirá el Nobel? ¿publicará el autor de estas líneas su Media Luna????

Comentarios

Entradas populares de este blog

Homenaje a las estrellas

* (Astro primero) Es importante saber lo poco que importa lo que hacemos frente al mundo, y lo que hace el mundo frente a las altas esferas, y lo que hacen las altas esferas frente a la gente, que a fin de cuentas no sabe comer sopas sin dejar de mirar hacia la cuenta. (Segundo lucero) Es importante no perder como hemos hecho la cuenta de las estrellas. (Estrellita) Aunque la gente viva de noche en los sueños. (Estrell**a) Muchos de los cuales no se cumplen o se cumplen chapuceros. (Resplandor postrero)

Eyra Agüero Joubert

Eyra Agüero tuvo de nacimiento el enorme regalo de una patria dual. Puerto Rico la vio nacer, pero la República Dominicana le donó la sangre de sus padres. Así, hija de inmigrantes, tuvo en Puerto Rico su cuna, en Santo Domingo su familia extendida, y en el resto de Latinoamérica, una inconmensurable patria que lo mismo le contaba tradiciones folklóricas en español, que le cantaba nanas en portugués-brasileño. Entre contar y cantar trabaja Eyra, haciendo de la risa un arte (el reconfortante arte de la amabilidad), y de la voz una herramienta, o mejor, un disfraz, un elegante disfraz tras el cual esconderse, dejando solo al descubierto la hilaridad o el dramatismo de los personajes cómicos o trágicos que le toque interpretar. Pero antes de hablar de la actriz que hizo el número 5 en la lista de las 10 comediantes femeninas más queridas por el público puertorriqueño, según ha reseñado el periódico Primera Hora hace exactamente dos meses y nueve días (jueves 16 de abril

El símbolo literario: Prejuicios, alcances y promesas…

  Comencemos por el trago amargo de los prejuicios que la mayoría de los ciudadanos contemporáneos (escindidos entre una fe de oídas y un racionalismo hecho de ojeadas al noticiero) posee respecto al símbolo. Las asociaciones negativas, connotaciones o prejuicios que encontramos diariamente en menoscabo del símbolo me parece que en principio se reducen a los siguientes tres, a saber: 1. “Toda metáfora es un símbolo” (o viceversa); 2. “Toda obra simboliza --o metaforiza—algo”; 3. Finalmente (y a contrapelo de los dos primeros): “Nunca el símbolo es el resultado intencional del autor”. La confusión entre metáfora y símbolo ocurre tanto dentro como fuera del ámbito literario, aun cuando para la mayoría de las personas (o, si se quiere: para la mayoría de los “no lectores”), lo metafórico equivale decididamente a lo no literal. Aun así, nadie suele llamar metafórico a un acto como el de vestirse con túnica y birrete de cartón para proclamar públicamente que ha completado una s