Ir al contenido principal
Reglas de cierto certamen literario

1. Se podrán someter cuantos escritos sean necesarios para impresionar al jurado.

2. Pero los textos deberán evidenciar que fueron escritos con apasionamiento o amor.

3. La consigna que nos rige es: "No hay trabajos malos, sino jueces exigentes."

4. El premio será sólo una festiva propaganda oral del escrito, a través de los pequeños o grandes círculos en que se mueve el jurado. Nos parece suficiente...

5. En caso de plagio, el ganador bajará la vista, al toparse con uno de los miembros del jurado por la calle.

6. Si piensa que alguien puede someter un trabajo mejor que el suyo, no compita.

Hoja-labra: "El texto, en la calle, labra."

Comentarios

Jorge Luis Rodriguez Ruiz: ha dicho que…
Esto dijo mi esposa, y le quedo genial!!:

Me gusta la idea del laborioso papel.Se cancela un poco, esa nocion que tienen algunos, de que escribir es de ociosos.

La palabra ojala se cuela atrevidamente. Imperioso el deseo?

Entradas populares de este blog

Sempiternus

Fui a la playa a contemplar la arena: semillas de aquella piedra con la que tallé tu nombre, Carmen Haddys. Antes de la forja y la ponderación de la perla. Antes de la domesticación de los océanos. Fui a buscarte, mi amor, porque estás hecha de mar y transparencia.

Freddy Acevedo Molina, "Teatro Vulgar" y casi todos los orgasmos que usted quiera

1.       Freddy Acevedo representa en su teatro lo que él quiere ; no lo que el público quiere, ni muchísimo menos, lo que el crítico quiere. Su teatro es modelo ejemplar de libertad; de voluntad domesticada a fuerza de imágenes requete-entramadas coherentemente, unas sobre otras.   2.       Su teatro es una especie de espontaneidad pensada.   3.       Y de la libertad con que lo escribe es que saca Freddy la alegría para (re)presentarnos en escena sus largas, flacas y peludas extremidades.      4.       Cuatro obras componen Teatro Vulgar : “Las sombras desenchufan”, “Cráneo azul in the Yellow House”, "Clue" y "El sex tape de Milo y Olivia".   5.       Se trata (el libro) de una auto-publicación facilitada por la compañía-editorial Trafford Publishing, que ha tirado en este caso un libro de esos blanditos, que se pu...

La razon comprometida

David Rodriguez , filosofo, no usa drogas a pesar de que lleva un lustro viviendo en Nueva York. Ahí se doctora, haciendo una revaloracion de la epistemología (filosofía del conocimiento) desde una perspectiva del lenguaje. Digo, eso creo haber sacado en claro de nuestra ultima conversación...