¿Por qué la huelga de la UPR ha sido un éxito que al parecer va a rendir los frutos esperados, y no así, todas las protestas de los sindicatos opuestos a la Ley 7? Ni siquiera la Marcha Nacional de finales de 2009 surtió algún efecto a favor de los cesanteados. ¿Por qué?
Es importante aclarar que en el apoyo a los estudiantes de la universidad del estado, estos no protestan solos, pues la hermandad de empleados no docentes, que incide en el funcionamiento de la universidad, los respalda. También, los profesores, a través de su órgano político: la asociación de profesores universitarios. Alguien que imagine a los estudiantes sin ese doble aval y nos diga cuán difícil se les haría la situación.
Los empleados de gobierno no cuentan con ese tipo de ayuda “desde adentro”, que yo sepa. Lo ideal sería que los beneficiarios de una agencia o departamento gubernamental, es decir: el pueblo que recibe los servicios de esa agencia cualquiera, se unieran a las protestas en contra de los despidos ejecutados en la misma. Lo otro sería que los empleados que conservaron sus puestos realicen un paro en sus labores indefinido, pero esto se los prohíbe la ley. De manera amplia, me arriesgo a plantear que la única forma de contrarrestar la llamada Ley 7 de Reforma Fiscal, es desacatar la Ley 45 y promover la huelga “sistémica” de las agencias públicas. Un apoyo total de unos empleados a otros.
En el caso de los estudiantes, se puede alegar que no todos se fueron a huelga, pero es obvio que aquel que no intente cruzar la línea de piquete, apoya la huelga, pues el que calla otorga. Muchos universitarios incluso aprovechan este tiempo de huelga como uno de asueto. Los universitarios no tienen oposición interna, ni por parte de sus iguales, ni por parte de sus “superiores” inmediatos (los profesores), ni por parte de “sus” servidores inmediatos (la hermandad). A ellos se han sumados algunos padres, algunos sindicatos (reciprocando el apoyo que han recibido de estos durante todo lo que ha transcurrido del cuatrienio), muchos artistas, muchos ciudadanos…
De otra parte, si yo no he recitado nada frente a los estudiantes se debe precisamente a que hay que evitar un caos nacional de proporciones inimaginables. Dios nos coja confesaos.
Es importante aclarar que en el apoyo a los estudiantes de la universidad del estado, estos no protestan solos, pues la hermandad de empleados no docentes, que incide en el funcionamiento de la universidad, los respalda. También, los profesores, a través de su órgano político: la asociación de profesores universitarios. Alguien que imagine a los estudiantes sin ese doble aval y nos diga cuán difícil se les haría la situación.
Los empleados de gobierno no cuentan con ese tipo de ayuda “desde adentro”, que yo sepa. Lo ideal sería que los beneficiarios de una agencia o departamento gubernamental, es decir: el pueblo que recibe los servicios de esa agencia cualquiera, se unieran a las protestas en contra de los despidos ejecutados en la misma. Lo otro sería que los empleados que conservaron sus puestos realicen un paro en sus labores indefinido, pero esto se los prohíbe la ley. De manera amplia, me arriesgo a plantear que la única forma de contrarrestar la llamada Ley 7 de Reforma Fiscal, es desacatar la Ley 45 y promover la huelga “sistémica” de las agencias públicas. Un apoyo total de unos empleados a otros.
En el caso de los estudiantes, se puede alegar que no todos se fueron a huelga, pero es obvio que aquel que no intente cruzar la línea de piquete, apoya la huelga, pues el que calla otorga. Muchos universitarios incluso aprovechan este tiempo de huelga como uno de asueto. Los universitarios no tienen oposición interna, ni por parte de sus iguales, ni por parte de sus “superiores” inmediatos (los profesores), ni por parte de “sus” servidores inmediatos (la hermandad). A ellos se han sumados algunos padres, algunos sindicatos (reciprocando el apoyo que han recibido de estos durante todo lo que ha transcurrido del cuatrienio), muchos artistas, muchos ciudadanos…
De otra parte, si yo no he recitado nada frente a los estudiantes se debe precisamente a que hay que evitar un caos nacional de proporciones inimaginables. Dios nos coja confesaos.
Comentarios